miércoles, 18 de noviembre de 2009

PROVIDENCE


Imagen portada: Aina Lorente & Agustín Fernández Mallo

Texto: Eloy Fernández Porta & Juan Francisco Ferré


¿Qué es Providence? ¿Un videojuego maléfico? ¿Una monstruosa página web? ¿Un complot ocultista con ramificaciones tecnológicas? ¿Una película imposible sobre el futuro? Todas estas cosas y ninguna. Desde luego no es una biografía apócrifa de Lovecraft, por más que éste pueda declarar en el epígrafe: “Providence soy yo”.

Providence es una novela hipnótica que encierra muchas novelas o versiones de sí misma, todas ellas sorprendentes y originales: relato de terrores y terrorismos post-11S, novela de campus pornográfica, reverso tenebroso del american way of life, reescritura no cinéfila de la Historia del Cine; retrato, en fin, en uno de sus niveles más lúdicos, de una conspiración a escala global para imponer el mundo virtual al mundo real.


Providence es un libro rompedor y vírico. Su conspicuo protagonista, Álex Franco, es un cineasta español con una visión perversa de Hollywood. Tras obtener cierta nombradía underground con sus cortos juveniles, ve como su primera película fracasa en el Festival de Cannes. Es aquí, sin embargo, donde conoce a una misteriosa mujer, Delphine, que le propone el proyecto de una nueva película, Providence. Este es sólo uno de los principios visibles de la novela. Otro podría suceder unos meses antes, en Marraquech, donde Franco, como artista ambicioso e insatisfecho, se atreve a firmar un pacto fáustico a fin de liberarse de la maldición de su vida.

Providence es también la ciudad norteamericana en la que Franco, personaje conflictivo y escandaloso, se instala con la promesa de realizar todos sus deseos y fantasías sin hacerse una idea de lo que le espera allí: sectas mafiosas, conspiraciones apocalípticas y sociedades secretas que pugnan por el control de su metamórfica realidad. Ese siniestro mundo lovecraftiano que acaba devorando a la novela y a su protagonista.

Providence es, en suma, un viaje cinematográfico al fin de la noche americana. Esa América real que encubre el horror gótico tras una fachada colorista de glamour y consumo. Esa América que vive ya una utopía tecnológica inimaginable sin renunciar a su imagen decimonónica y sus valores vetustos.

Providence pretendería dar así una respuesta contundente a lo que se puede esperar de una novela escrita a comienzos del siglo XXI.

sábado, 7 de noviembre de 2009

FRENCH CONNECTION


François Monti vuelve a hacer de las suyas en su nuevo blog Fricfrac Club y escribe una tan informada como inteligente crítica de mi novela anterior La fiesta del asno. Era casi inevitable que el francés acabara haciendo justicia poética a una novela que se abría con un epígrafe de Voltaire, extraído de la entrada correspondiente al Asno de su Diccionario Filosófico, con el fin de allanar la rareza del título y orientar, al mismo tiempo, una lectura ilustrada de la novela. Por desgracia, no todos supieron comprenderla, no sé si por problemas con la lengua original en un país habituado a los doblajes o por alguna extraña clase de ceguera.

Por si a alguien le interesa, la cita de Voltaire rezaba así: "Nous avons des livres sur la fête de l’âne et sur celle des fous; ils peuvent servir à l’histoire universelle de l’esprit humain". No se puede decir más.