El desprecio de lo femenino sostiene todavía el edificio conceptual de los paladines del ideal ascético. De manera que la elaboración de una teoría del libertinaje supone la superación de la misoginia y su aniquilamiento. Pues este aborrecimiento procede del miedo y de los fantasmas de una masculinidad mal resuelta, vivida al estilo arrogante de la violencia y la agresividad. Toda virilidad digna de este nombre debe proceder de la fuerza –lo contrario de la violencia-, y del deseo de que la misma fuerza excite al cuerpo, a la carne y al alma de las mujeres.
Michel Onfray
Como todo el mundo sabe, este blog ha sido tachado por fundamentalistas de inmoral, ofensivo o dudoso. No nos engañemos. El problema no ha sido la imagen, ni su obscenidad, ni su carácter pornográfico. O no sólo. El problema ha estado más bien en la asociación de imagen y texto. En la concatenación de ideas entre el célebre icono de Courbet, de una impudicia y una indecencia intolerables aún hoy para los sectarios y los obtusos de siempre, una profanación del foco sacramental de la visión fanática de la realidad, y esta reflexión pertinente sobre la caída de todos los velos, la elisión de la feminidad con que se construye toda versión religiosa, sublime o sagrada del mundo:
Hoy que tanto se discute sobre velos y burkas, y se asiste impotente a través de la televisión e internet a espantosas lapidaciones de mujeres y ablaciones de clítoris, convendría recordar por decencia intelectual las lúcidas palabras de Savatier acerca de este cuadro subversivo que “representa al mismo tiempo el blasón universal de la heráldica femenina y un himno a la libertad, la de crear y pensar liberándose de los tabúes engendrados por el odio al cuerpo que las religiones y filosofías nacidas en la cuenca mediterránea habían intentado dictar al mundo”.
Por una vez, la palabra más que la imagen. O la palabra potenciada por la imagen. La denuncia doblemente gráfica del “punto ciego de la especie”. En este sentido, no creamos que la mentalidad medieval o victoriana sea cosa del pasado. Un atavismo superado. Una ideología trasnochada. El control de las imágenes y el control de las palabras gravitan sobre nosotros tanto como antes, si no más, aunque por astucia se disfracen con otros nombres, se disimulen bajo otros signos, apelen a supuestos valores fundamentales, su discreción pase por una más refinada variante de la educación y el respeto. Lo sucedido no invita, por tanto, a la claudicación o el silencio sino a la exacerbación del discurso. La promulgación del exceso verbal, el libertinaje de las palabras y las imágenes, como medio de una expresión libre de trabas y corsés intelectuales. La así llamada incorrección política no es una actitud más en este contexto. Una voz más en la controversia. Es el gesto de afiliación imprescindible para indicar que uno no se alinea con los fanáticos, los comisarios, los censores, los cínicos, los puritanos, los asesinos o los hipócritas. Mucho menos con la diplomacia cultural, otra máscara cínica. Contra esas formas conformistas de renuncia, sólo cabe ostentar políticas libertarias del discurso, el gusto, la acción y la inteligencia.
Todo mi agradecimiento, pues, a las amigas y amigos que en estas circunstancias manifestaron públicamente su apoyo a este blog y su rechazo a cualquier censura del mismo. Activa o pasiva.
muy bien dicho.
ResponderEliminardesconozco los problemas que se han suscitado en relación a este blog (lo comenzaré a leer en breve) pero esta nota es muy clara. Saludos!
Alguna vez yo mismo subi esa imagen de Courbet a mi blog y nadie me censuró (claro, a mi solo me leen algunos amigos)...
ResponderEliminarYo creo que volveré a poner ese post, como parte de esa inconformidad pasivo-agresiva.
Saludos.
¿Dónde está la censura? Yo puedo ver los (magníficos) cuadros y la crítica a la supuesta censura sin ningún problema.
ResponderEliminarAunque parezca mentira, hay gente que no le interesa ver determinadas imágenes por mucho que nos gusten a nosotros. No entiendo porque tiene que ser más progresista no avisar de dicho contenido. A mí por ejemplo aunque otros les dará igual, me gusta que me avisen de imagenes duras por la televisión mientras estoy comiendo para cambiar de canal.
Y si todavía no gusta contemplar los derechos de los demás, hay más sitios por internet para alojar este blog,¿no?
Comentario sobre tu blog
ResponderEliminarHola Juan Francisco.
ResponderEliminarLe doy mi total y modesto apoyo por esa calificación que no puedo entender. Por unos días fue complicado entrar en su blog.
Gracias a usted conocí a William T. Vollmann, tengo su novela "Argall", tiene una pinta estupenda.
Sus textos sobre Pynchon son extraordinarios.
Muchas gracias.
Vuelvo de vacaciones (nada merecidas, por cierto) y me encuentro con que han señalado a este cuaderno como pronográfico, ofensivo o cualquier cosa parecida.
ResponderEliminarSe ve que los censores y sus aquilatados policías saben bien poco de pornografía. Este cuaderno es, aunque no lo parezca, muy casto, aunque trate a veces de sexo o de violencia, incluso cuando habla de literatura es casto.
En fin, sr. Ferré, que habrá que aguantar el chaparrón y seguir en nuestras trece (cada uno en las suyas, que terminarán por sumar quién sabe cuánto.)
Ánimo y cuide que no le acusen de pedófilo.
P.D.: Lo más gracioso (o triste) es que hay gente que cree que vivimos en una sociedad progresista.
Lo que veo es que la misma censura reaída sobre tu blog hizo que no sólo reflexionaras y a la vez nos hicieras reflexionar sobre lo que hacemos con nuestras palabras y pensamientos. También hizo y hace que lo que piensas sobre ello tuviese una nueva prueba: que se diría, superada. Con o sin censura lo incorrecto se hace necesario.
ResponderEliminarun saludo,
Bueno, gracias a todos por los comentarios y el apoyo. Voy por partes.
ResponderEliminarHombre, amigo Guerrero, como usted sabe bien mi faceta más escandalosa, de pornógrafo y corruptor, la reservo para cuando me prostituyo como novelista (La fiesta del asno, Providence, etc.). Como bloguero, oficio menos lucrativo, opté desde el comienzo por una intermitente castidad que, diga lo que diga, me mantiene al margen de ese mercado de infecciones venéreas que tanto daño ha hecho en la historia a los mejores cerebros de cualquier generación, la suya, la mía, la de todos. No tema que la acusación de pedófilo en mi caso es más que improbable. Aprendí hace mucho tiempo la lección de Polanski y el ardor...
No he querido, amigo Teddy, exagerar lo sucedido. La interrupción del blog durante unos días, en mi ausencia, y las alertas de los amigos sobre el caso no fueron baladíes. Me parece interesante poder reflexionar sobre todo esto (gracias emmagunst, Mario, Malvisto y Rafael) teniendo en cuenta que ni la imagen ni el texto tendrían nada de ofensivo o dudoso salvo para la primitiva mentalidad de los denunciantes. Desde luego que cada cual tiene derecho a ver lo que le apetezca y a ser avisado sobre contenidos potencialmente desagradables, pero es que en este caso las denuncias son ridículas, tanto por la imagen elegida para censurarme o imponerme un velo pudibundo (!) como por el texto que subrayo, una simple acusación cultural. De todos modos, la mudanza ha comenzado parcialmente, si se fija en el enlace incorporado a la entrada objeto del falso escándalo...
En cualquier caso, todo esto es una prueba de que este blog no ha caído en el vacío, ni deja indiferente. Ser ofensivo, como alguien me recordaba no hace mucho, es una virtud que da prestigio y, desde luego, no sume en la melancolía...
Un placer contar con vuestras interesantes reflexiones.
Bueno, yo llego tarde a los comentarios (más o menos como siempre en todas partes). Solamente reafirmarme en su visión del mundo y exponerle mi apoyo. He de confesar que hace unos días visité su bitácora y me llevé una gran decepción al ver que ya no existía. Fui tan cándido que no pude imaginar que se había vetado por la imagen de Coubert. Y, efectivamente, aunque muchos creemos estar viviendo en el siglo XXI, “ellos” siguen cabalgando con su mezquindad e insisten en otorgarse la autoridad de lo que tenemos que oír, ver o leer, y lo que no. Y me permito agregar que no sólo el desprecio a la realidad femenina; la visión de un falo erecto o todo lo colindante a lo políticamente incorrecto y lo que habita fuera de un anquilosado precepto moral, es motivo para que se escandalicen hipócritamente.
ResponderEliminarSinceramente, considero su blog muy útil para mí. Es una guía de información de un tipo de literatura y de pensamiento a los que soy afín.
Me alegro de poder seguir contando con estas páginas aunque tenga que dar otro “clic” más, al ratón.
Avanti! Sr. Ferré.
Por cierto, ya adquirí su Providence. Espero manifestarle pronto mi opinión.
Un cordial saludo.
Solamente un par de anécdotas sobre la censura: le preguntaron a la editora del Play Girl americano porqué no ponía penes en erección en sus reportajes (los modelos salían desnudos, pero nada más) la respuesta fue que en ese caso deberían pagar casi un 30% más de impuestos, cosa que no sucede en el Play Boy (al parecer ellos sí pueden publicar chochitos mojados sin pagar más impuestos).
ResponderEliminarLa otra anécdota sucede en la versión americana de "Godzilla": cuando la simpática monstruita pone sus huevos, el protagonista, M. Broderick, exclama "Dios mío, se ha reproducido, debe ser una rara especie de hermafrodita!!". Pues no hijo mío... ¡¡¡¡¡¡Godzilla es una hembraaaaaaaaaaaaaaaa!!!!!!
Si es que las mujeres a estas alturas de la cilvilizacion, cuando nos quitamos la ropa seguimos seguimos produciendo ese miedo primigenio a lo desconocido. No es otra cosa mas que miedo.
ResponderEliminarConde, mil gracias por su apoyo. No creo que sea la imagen de Courbet, ni siquiera puedo imaginar lo que fue. Yo también necesito de lectores y seguidores como usted. Espero con impaciencia su lectura de PVD...
ResponderEliminarCristina, gracias por venir, qué buena tu anécdota comparativa sobre los Play (Girl and Boy). Lo de los impuestos y la erección es magnífico, todo un símbolo de la cosa. Y lo de Godzilla, no comment, se ve que la cultura de masas sigue empantanada en la visión decimonónica del sexo...
Adriana, cuánta razón, cómo me gusta tu comentario sobre la desnudez femenina, imagino que más de un censor se le echaría encima para borrar todas sus sugerencias...
Le tengo enlazado desde hace un tiempo.Su blog es magnífico,y,como todas las cosas que se cuestionan de verdad nuestra sospechosa realidad,no es bien vista.Le aseguro que si a mí me hubieran hecho lo mismo con mi blog me sentiría orgulloso.
ResponderEliminarUn cordial saludo.
Muchas gracias, Francisco, por tu mensaje de apoyo y tus palabras de aprecio al blog. Más que orgulloso me siento aún sorprendido, perplejo más bien, porque algo tan insignificante pueda ofender o molestar a alguien, sea quien sea. Por desgracia, ya me voy acostumbrando a la ventana del pudor y su mensaje algo ilógico o paralógico...
ResponderEliminarHola:
ResponderEliminarMe quedé alucinado cuando desapareció tu página. Llegué a preguntarle a Agustín Fernández Mallo en su blog por si él sabía algo.
Vuelvo de vacaciones y me encuentro este acceso restringido a mayores. Menos es nada, pero yo me plantearía mover mis escritos a otro servidor menos pacato. Aunque creo que lo que estoy seguro es de no me gustaría que desapareciera...
Además es la única página del mundo que enlaza con la mía ¡me quedaría sin ningún visitante! esto es una broma, sobre todo me preocuparía quedarme sin poder leerlo.
Un abrazo
Hola, José, un placer tenerte por aquí de nuevo. Gracias por el interés en el blog. Se me pasó tu mensaje, ahora te contesto. No descarto mudarme, aunque me daría pena, sobre todo por el bloqueo en Google, que me está haciendo perder lectores potenciales. Me alegra que mi blog sirva para que el tuyo tenga visitantes. Esto es una red por la que circulamos todos...
ResponderEliminarGracias por tu apoyo y tus comentarios.
Un abrazo,
JF
J'adore tous les maudits du monde!!!! et de l'extra-monde!!!!
ResponderEliminarBouge les lignes, JFF!!!!
kisses from Paris
Merci, Sandra. Je ne me sens pas exactement maudit, plutôt harcelé, même traqué, et surtout faché. Je suis, en effet, sur le point de passer le blog ailleurs. Ça ne va pas tarder. Tu verras bien...
ResponderEliminarJe t´embrasse.